El
lunes comienzo un programa de RTVD de Toledo. Una nueva experiencia. Con un
equipo de periodistas jóvenes. Y... pagando novatadas como es normal.
El título
del programa lo eligieron los jóvenes de la casa: ASAMBLEA EN LA CARPINTERÍA y
responde a un cuento conocido que os copio a continuación.
Cuentan que en la carpintería hubo una vez una
extraña asamblea. Fue una reunión de herramientas para arreglar sus
diferencias.
El martillo ejerció la presidencia. Pero la
asamblea le notificó que tenía que renunciar. ¿La causa? ¡Hacía demasiado
ruido! Y además se pasaba el tiempo golpeando.
El martillo aceptó su culpa, pero pidió que
también fuera expulsada la garlopa. ¿Por qué? Hacía todo su trabajo en la
superficie. No tenía nunca profundidad en nada.
La garlopa aceptó a su vez, pero le pidió la
expulsión del tornillo. Adujo que había que darle muchas vueltas para que al
fin sirviera para algo.
Ante el ataque, el tornillo aceptó también. Pero
a su vez pidió la expulsión del papel de lija. Hizo ver que era muy áspero en
su trato y que siempre tenía conflictos con los demás.
Y el papel de lija estuvo de acuerdo, a condición
de que fuera expulsado el metro, que siempre se pasaba midiendo a los demás con
su medida, como si fuera el único perfecto.
En eso entró el carpintero, se puso el delantal y
se fue al banco de trabajo para iniciar su tarea. Utilizó el martillo, la
garlopa, el papel de lija, el metro y el tornillo. Finalmente la tosca madera
inicial se convirtió en una hermosa ventana.
Cuando la carpintería quedó nuevamente sola, la
asamblea reanudó la deliberación. Fue entonces cuando tomó la palabra el
serrucho, y dijo: "Señores, ha quedado demostrado que tenemos muchos
defectos, pero el carpintero trabaja con nuestras cualidades. Eso es lo que nos
hace valiosos. Así que no pensemos ya en nuestros puntos malos y concentrémonos
en la utilidad de nuestros puntos buenos".
La asamblea encontró entonces que el martillo era
fuerte, contundente, y la garlopa suave, eficaz. Se dieron cuenta de que el
tornillo tenía habilidad para unir y dar fuerza; y el papel de lija era
especial para afinar situaciones y limar asperezas. Y observaron que el metro
era preciso y exacto.
Se sintieron entonces un equipo capaz de ayudar a
producir muebles de calidad. Se sintieron orgullosos de su fortaleza, y de
poder trabajar juntos.
Pero
me diréis de qué va el programa. Es la Delegación de Catequesis en colaboración
con la RTVD la que realiza el programa con el objetivo de motivar el trabajo de
los/las catequistas de nuestra diócesis de Toledo.
Primero,
va el saludo; luego, las preguntas de la calle; después, esbozar las
respuestas; en el centro del programa un cometario sencillo sobre el tema;
luego un reportaje de un grupo de catequistas;
y por último, avisos y despedida.
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